¿Qué nos sugieren las reiteradas imágenes de los botellones en las calles? ¿Nos sentimos interpelados por ellas? ¿Participamos en alguno de esos botellones? ¿Tenemos hijas e hijos que son parte protagonista de esas escenas? ¿Somos capaces de explicar qué pasa? ¿Asumimos alguna responsabilidad como amigos, padres, sociedad en lo está pasando?
¿Qué hay detrás de esa marea humana que se reúne a altas horas de la madrugada en las ciudades con el nexo de la bebida? ¿El ocio es esto para este colectivo? ¿Hemos convertido el ocio en una huida? ¿Por qué nos cuesta entender que en algunos casos estas concentraciones finalicen en vandalismo, agresiones y enfrentamientos con la policía? ¿Estamos generando una sociedad violenta, agresiva y superficial?
¿Por qué da la sensación de que en la mayoría de ellos cunde una cierta insatisfacción con lo que viven y necesitan desquitarse? ¿Tiene algo que ver el año y medio de pandemia que hemos vivido, o esta es una situación larvada mucho antes y ha florecido ahora con más fuerza? ¿Estamos sólo ante un problema de orden público, tal y como señalan algunos responsables políticos? ¿De qué ideología son estos jóvenes? ¿Responden a alguna?
¿Los medios de comunicación y los mensajes que lanzan influyen en el refuerzo de estas conductas, al plasmarlas de forma reiterada y con tintes demasiado amarillistas? ¿Estamos de nuevo criminalizando, de forma generalizada y sin distinción, a una franja de edad especialmente vulnerable? ¿Hemos criado una generación de jóvenes frágil que sufre desmesuradamente ante episodios de estrés?
¿Nos estamos comportando de forma paternalista cuando centramos nuestros comentarios, los debates en las redes sociales y los editoriales de la prensa sobre lo que está pasando en nuestras ciudades? ¿Nos fijamos solo en el dedo cuando apuntamos con él a la luna? ¿Hay de verdad algún problema oculto, o no tanto, en la trastienda de estos incidentes callejeros?
¿Somos capaces de defender que estos hechos son consecuencia de un problema de falta de valores? ¿Quién se hace responsable de esa carencia en la juventud? ¿Es un problema educativo? ¿La sociedad enseña al unísono o también está en crisis el modelo educativo? ¿Qué ejemplo damos los adultos? ¿No bebemos demasiado? ¿No respiramos violencia en cada uno de nuestros actos? ¿No nos saltamos las normas?
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